jueves, 12 de agosto de 2010

SIENDO CONSCIENTE DE TUS HÁBITOS




Sin profundizar en la impermanecia de la filosofía budista,añadiré sin embargo unas palabras de un poema de Nyoshul Khenpo:

"La naturaleza de todas las cosas es ilusoria y efímera,
quienes tienen una percepción dualista consideran
felicidad el sufrimiento,
como los que lamen la miel del filo de una navaja"


Debemos volver nuestra atención hacia dentro,cosa que no resulta tan fácil como pueda parecer a priori. Sin apenas percatarnos,somos arrastrados por nuestros hábitos y costumbres,nuestro mecanismo interno que funciona siempre de la misma forma cuando existen determinadas emociones y pensamientos que actúan como catalizador para provocar una reacción en cadena que siempre se comporta de la misma manera si no estamos conscientes y atentos para observarla y así modificarla si es necesario.Ellos actúan impunemente, de manera mecánica sobre nosotros,y gozan de su terreno ganado a fuerza de confundirnos, con ese parloteo interior incesante suyo ( nunca cesa,ni tan siquiera si hacemos otras actividades,incluso cuando nos recostamos,nuestra mente sigue bombardeando su propaganda sobre lo que a ella le interesa que tú creas) mientras que uno/a se va lamentando y llora desconsoladamente porque..siempre le suceden calamidades..siempre da con la misma clase de personas que lo dañan...Evidentemente,no entraré a opinar sobre el karma, simplemente,intento que al menos, en este presente en el que estás leyendo ésto,se llegue a captar por un segundo, o una eternidad, la verdad que existe en éste poema ,del mismo poeta y maestro budista anteriormente citado.Y que quizás en un momento difícil de tu vida puedas vislumbrar que tú mismo posees la capacidad para dejar de ser esclavo..si consigues una acción no mecanizada,un cambio sutil de tus pautas y costumbres, podrías percibir ese cambio de dirección en tus pensamientos,en tus emociones,en tu energía,en lo que te rodea y quizás de pronto te sientas..más ligero.


"Autobiografía en cinco capítulos"


1) Bajo por la calle.

Hay un enorme hoyo en la acera.

Me caigo dentro,

estoy perdida...impotente.

No es culpa mía.

Se tarda una eternidad en salir de allí.


2) Bajo por la misma calle.

Hay un enorme hoyo en la acera.

Hago como que no lo veo.

Vuelvo a caer dentro.

No puedo creer que esté en ese mismo lugar.

Pero no es culpa mía.

Todavía se tarda mucho tiempo en salir de allí.


3) Bajo por la misma calle.

Hay un enorme hoyo en la acera.

Veo que está allí.

Igual caigo en él...es un hábito.

Tengo los ojos abiertos.

Sé dónde estoy.

Es culpa mía.

Salgo inmediatamente de allí.


4) Bajo por la misma calle.

Hay un enorme hoyo en la acera.

Paso por el lado.


5) Bajo por otra calle.



Poema extraído del Libro Tibetano de la Vida y la Muerte de Sogyal Rimpoché.

No hay comentarios:

Publicar un comentario